Fue corredor de bicicletas y posteriormente piloto de automóviles, durante la última década del siglo XIX y principios del XX.
En 1905, fue cofundador de "Garajes Società Ruiniti Fiat-Alberti-Storero", que sirvió inicialmente como un servicio de venta y mantenimiento de Fiat-Automobili.
En 1908, Fiat se hizo cargo de la empresa de control y cuatro años después Storero se independizó creando la "Storero Fabbrica Automobile", en Turín, fabricando hasta 1919 modelos de cuatro y seis cilindros.