Rumania en los años 70, la población de Žarneşti de 25.000 habitantes (provincia de Braşov) encontró la receta para producir: motocicletas, ciclomotores, misiles, ojivas y granadas militares. En la misma fábrica SC Tohan SA Žarneşti, que era una fábrica militar, nacieron bicicletas urbanas.
Al mismo tiempo, hay dos marcas, MOBRA y PEGAS, que iban a sobrevivir al ascenso y la caída del comunismo, pero también al turbulento período posterior...